La catedral de Salerno, es la guinda del pastel de un centro histórico precioso.
Dedicada a Santa María de los Ángeles y al apóstol San Mateo, construida entre 1080 y el 1085.
De fachada Barroca 1767, conserva del románico el portal (puerta de los leones), también hay un escrito que recuerda la alianza entre los principados Normandos de Salerno y de Capua.
El friso que representa una Vid (símbolo de la sangre de Cristo) y decoraciones de animales, un chimpancé (símbolo de la herejía), y una paloma que muerde unos dátiles (símbolo de alma que se alimenta de placeres ultraterrenos), es de una belleza extraordinaria.
Sobre el pórtico domina el campanario árabe-normando construido en la primera mitad del siglo XII, en el atrio se abre además una puerta de bronce fundida en Constantinopla formada por 54 lastras que en su mayoría representan cruces Bizantinas.
La Basílica: Dentro domina un estilo del siglo XV, se han encontrado rasgos de trabajos medievales y frescos de la escuela Giottesca. En el ábside derecho está la urna del papa Gregorio VII que murió en el exilio en Salerno.
La Capilla del tesoro: Tiene un techo con frescos preciosos y representan el llamado Paraíso Salernitano.
obra del pintor Filippo Pennino.
También conservan las estatuas en plata del Santo Patrono del Papa Gregorio VII de los mártires salernitanos.
Patio Central
La Cripta: Es impresionante, de estilo barroco, restaurada en 1680 por Domenico Fontana, es sin duda una joya dentro de el precioso Duomo, todos los frescos del techo son obra del pintor Belisario Corenzuio. Los mármoles son de la mitad del siglo XVIII son obra de Francesco Ragozzino, en el centro se encuentra la tumba de San Mateo y representa el Sancta Sanctorum (bajo el altar mayor).
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