Entre Siena y San Gimignano, encontramos este maravilloso pueblo Toscano de 20.000 habitantes.
Se encuentra dividido en dos áreas muy bien definidas: Colle Bassa y Colle Alta.
Sus modernos barrios periféricos le han hecho mucho daño, pero no hay que cometer el error de no llegar hasta su centro medieval.
Piazza Canonica
La prosperidad Medieval del pueblo se basaba en la abundancia de agua, que contribuyó a la manufactura del vidrio y el papel, aún hoy día son los pilares de la economía local.
La parte más elevada ofrece unas vistas extraordinarias y la parte más baja tiene un mercado donde todos los viernes se vende todo lo imaginable.
De Marzo a Octubre se organizan Tours donde se ahonda en la industria del vidrio.
Vista Panorámica
En Colle alta encontramos la Piazza del Duomo, donde podemos apreciar su imponente reloj del campanario.
Uno de los 30 clavos que sostuvieron a Cristo en la cruz se encuentra guardado en la catedral ante unas extremas medidas de seguridad. Se la utiliza en la procesión de Colle Alta que se celebra el mes de Septiembre. Cuenta la leyenda que durante que durante las cruzadas se trajo a la Toscana desde Tierra Santa, y un cura local lo conservó en la catedral hasta hoy.
También en Piazza Duomo, encontramos el Museo Archeologico, el Museo Civico y el Museo d'Arte Sacra.
Tipica calle de Colle
Absolutamente recomendable callejear por estrechas "callecitas" y disfrutar del típico ambiente Toscano, llegar a la calle principal Vía del Castello y llegar a sus maravillosas murallas Medievales.
Para poder adentrarse en el Medievo es imprescindible perderse entre sus muros y puerta de Colle di val d'elsa.
En Colle Basso encontramos su espectacular museo del vidrio.
No deje de visitarla sin duda es otro de esos paraísos desconocidos de la Toscana.
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